ARANTXA ALVARADO

Todo comenzó por la que en Francia se considera la santa de los músicos, Santa Cecilia. Es una tradición con origen católico y procede de cuando Cecilia se encontraba casándose en una iglesia cuando de repente se puso a cantarle a un altar. A partir de entonces fue inspiración para distintos pintores que la representaron en varias pinturas tocando diferentes instrumentos.

El festejo como tal comenzó un 22 de noviembre para conmemorar la fecha de muerte de Santa Cecilia con un evento realizado en Evreux, Normandía (Francia), en el año de 1570 con un torneo de compositores de la época. La tradición pasó a Escocia en 1695, después a Alemania España y Francia. En América esta tradición empezó en Río de Janeiro (Brasil) entre 1919 y 1920 para luego extenderse al resto del continente.

Sin duda es una celebración que no puede pasar desapercibida porque la música sin ejecutante no es nada, la música representa en gran parte la cultura de uno o varios individuos y por ende ha influenciado en todos los aspectos de la vida cotidiana, incluyendo aspectos sociales o incluso políticos.