Recordamos a la legendaria agrupación de Shaun Ryder que surgió tras el fin de Joy Division para encabezar el movimiento Madchester
REDACCIÓN QRP
La historia de la música tiene diferentes capítulos que envuelven a protagonistas inesperados y que, con algo de suerte, han logrado construir un legado que pasa de generación en generación. Sin embargo, también existen agrupaciones que tuvieron todo para convertirse en íconos mundiales, pero por diversos comportamientos, la industria y los fans no los perdonaron y quedaron en casi el olvido. Tal es el caso de Happy Mondays, una de las bandas más icónicas de Manchester, Inglaterra, pero también una de las más polémicas.
Era 1980 y luego de la muerte de Ian Curtis y la desintegración de Joy Division, la mítica disquera Factory Records, comandada por Tony Wilson, buscó con su club The Hacienda, que surgiera un grupo que pudiera cubrir el hueco de su principal ingreso. A pesar de esto, también se buscó que siguiera el cambio impuesto por Curtis y su disco 'Closer', en el que la electrónica influenciada por Kraftwerk ya comenzaba a tomar mayor auge.
En un momento en el que se buscaban nuevos ídolos, pues apenas surgían bandas como The Smiths, The Stone Roses y más, Shaun Ryder hizo su aparición para formar Happy Mondays, en alusión a New Order, y a ser un personaje polémico desde el inicio, pues siempre ha estado inmerso en asuntos de drogas. A pesar de esto, Wilson impulsó a la banda con su disquera y club para que se volvieran todo un ícono de un movimiento que terminaría siendo denominado Madchester.
Fue hasta 1985 que el grupo completado por Bez, Paul Ryder, Mark Day, Paul Davis y Gary Whelan, lanzó su primer material en forma titulado 'Forty Five'. Dos años después llegó el LP debut 'Squirrel And G-Man Twenty Four Hour Party People Plastic Face Carnt Smile (White Out)' y con esto comenzaron una pelea también con Ian Brown y The Stone Roses.
Llegado la década de los 90, 'Bummed' y 'Pills 'n' Thrills And Bellyaches' sirvieron para confirmar su gran forma, incluyendo a su set a la aclamada cantante Rowetta, pero los problemas con las drogas fueron debilitando a pasos agigantados a la banda y aunque siguieron un año más y luego tuvieron reencuentros, nunca pudieron igualar la grandeza que tuvieron y que los encaminaba a ser una de las leyendas del Rock.
Recordemos uno de los éxitos de Happy Mondays: