REDACCIÓN QRP

Uno de los grandes músicos de todos los tiempos, a pesar de siempre haber estado inmiscuido en celebraciones y excesos, es Keith Richards, guitarrista de The Rolling Stones, quien ha dejado un legado que ya se puede ir repasando.

Nacido el 18 de diciembre de 1943 en Dartford, Kent, Inglaterra comenzó su interés en la música cuando asistía al colegio, participando en el coro, situación que tiempo después se acrecentó cuando conoció a Mick Jagger. Pero fue hasta 1962 que inició The Rolling Stones, banda con la que ha acumulado gran parte de su éxito.

Richards también ha destacado por las polémicas que envuelven su vida, sobre todo con las drogas y el alcohol, pues se ha dicho que ha estado cerca de morir a causa de esto, por lo que acude regularmente a Canadá para que le drenen toda la sangre y se la cambien por una nueva para que pueda seguir subsistiendo. Mito o realidad, este guitarrista ha sido considerado en varias ocasiones como uno de los más grandes de la historia.

Durante la década de los sesenta con The Rolling Stones, Keith se volvió un fenómeno, situación que continuó hasta los ochenta, cuando sus diferencias con Jagger se hicieron evidentes y tuvieron que hacerse a un lado para probar otros caminos. Debutó con su disco solista 'Talk Is Cheap', recibiendo buenos comentarios, pero tampoco como para hacerlo pensar en dedicarse a cantar por sí mismo.

Keith Richards siempre se ha mantenido en el ojo del huracán, pero eso le he permitido disfrutar de situaciones como participar en el cine, en específico en la exitosa saga 'Piratas Del Caribe', al lado del reconocido Johnny Depp.

En el recuerdo quedará su mítica declaración sobre que había inhalado las cenizas de su padre al morir, pero a pesar de que se nieguen o aumenten estas y más versiones, Keith Richards es un símbolo del Rock y lo seguirá siendo hasta el final de sus días.

Recordamos a Keith Richards con el clásico de The Rolling Stones: 'Let's Spend The Night Together'