LUCÍA TRIGUERO
(Twitter: @lugtriguero)
Basta con mirar el calendario e imaginar que nos encontramos en el 11 de julio de 1988 para remontarnos al lanzamiento de 'Substance', el disco que recopiló las últimas canciones de Joy Division.
Para aquel momento ya habían pasado ocho años de la muerte de su líder, Ian Curtis y ya se presenciaban los comienzos de New Order; sin embargo, aún habían quedado en el tintero canciones que no pertenecían a ningún álbum. De modo que una recopilación se volvió necesaria y allí nació 'Substance': originalmente con diez canciones, entre ellas 'Love will Tear Us Apart', 'Transmission' y 'Atmosphere'. El disco buscaba recoger aquello olvidado entre 1977 y 1980, como B sides y sencillos nunca antes publicados.
Es indudable que Joy Division continúa influenciando sin barreras de tiempo a músicos de diferentes estilos y generaciones. La poderosa voz de Curtis, el bajo líder de Hook, la energía de Morris y el toque post-punk de Sumner vienen a crear una fórmula que no podía fallar, sumado de una estética misteriosa y oscura que ha servido para inspiración en todos los ámbitos del arte.